Una de las ventajas de nuestro tratamiento de ortodoncia invisible en Bilbao es que permite quitarse el dispositivo para comer y para lavarse los dientes a fondo, manteniendo una higiene dental tan estricta como antes. Cuando llevamos ortodoncia tradicional tenemos que decir adiós a muchas cosas buenas, y una de ellas es el hilo dental.

El hilo o seda dental, junto con el enjuague, ayudan a eliminar restos de comida en las pequeñas zonas a las que no llega el cepillo. Aunque cepillarse tiene que ser lo más importante, a lo que dediquemos más minutos tengamos o no pasta de dientes a mano, el hilo, bien utilizado, es otro aliado contra la acumulación de placa bacteriana. Así tenemos menos probabilidades de sufrir infecciones en las encías, que pueden llegar a ser muy dolorosas además de dañar los dientes.

Sobre todo cuando comemos carne fibrosa, algo que puede hacerse bastante cuesta arriba con algunos brackets en lugar de nuestra ortodoncia invisible en Bilbao, el hilo es más rápido a la hora de librarnos de pequeños restos perceptibles, y más seguro que hacerlo con objetos desaconsejados como el anticuado palillo de dientes.

Para usar bien el hilo dental, tendrás que cortar un trozo largo cada vez, y enrollarlo en los dedos, más fácil si lo haces con el anular, para poder maniobrar bien con el índice y el pulgar. Hay que ir avanzando poco a poco con el hilo para introducir siempre un segmento limpio entre diente y diente, pero los movimientos deben ser solo de arriba abajo, no laterales (es como un rosario y cada punto interdental hay que limpiarlo con una de las “cuentas” del hilo).

¿Quieres saber más sobre seda dental u ortodoncia invisible? ven a Ortodoncia Carlton.